Sara

En mayo solo tenía un deseo: pasar las vacaciones de verano en España. Quería practicar el idioma, conocer a nuevos amigos y pasarlo bonita. Elegí Valencia como destino porque quería visitar una ciudad cerca del mar mediterráneo u porque una amiga mia me había aconsejado que viene esta ciudad. Luego, opté por Taronja ya que me ilusionaba mucho la cantidad de actividades ofrecidos y el hecho de que fuera una escuela que podía fomentar las amistades por su ambiente familiar. Total, he vivido los cuatro semanas más divertidas de mi vida y todas mis expectativas han sido supendas. He tenido la posibilidad de visitar dos grandes ciudades como Madrid y Barcelona, de participar un acontecimiento de locura, la Tomatina, de aprender a cocinar por ejemplo las delicias de Elche y la tortilla española, de bailar en la playa bajo las estrellas con jóvenes de otras escuelas, de aprender un montón de frases hechas. Pero de lo que siempre acordaré más carño es el calor, la disponibilidad y la simpatía de todos los profesores. Todo esto y mucho más en Taronja, una familia que me ha dejado huella. ¡Hasta pronto Taronja!